HOY...

Hay días que no te apetece sonreír, días que sólo quieres quedarte en la cama, tapado hasta los ojos y sólo; sólo contigo, con tu cuerpo, con tus pensamientos. Pero desgraciadamente esos días nunca puedes hacer lo que te da la real gana y al final cumples con tus obligaciones; te levantas de la cama, te duchas, vistes tu mejor disfraz y te conviertes en el actor del momento, digno de Óscar.

Hoy es uno de esos días para mí y claro está, no he podido encerrarme. Además, desgraciadamente, soy una mala actriz... Si estoy bien me podéis escuchar reír sin tapujos, reír abiertamente, reír sin complejos, reír como si fuera la última vez…; pero si estoy mal me callo y mis ojos pierden su brillo, mi sonrisa desaparece y mi cara dibuja un ápice de melancolía y tristeza…

Hoy no quiero hacer nada, se me han acabado las sonrisas…