Su argumento era bastante tonto, como todas las series de finales de los 80. Está ambientada en una Isla en la que viven todo tipo de frutas, vegetales, plantas y legumbres, su alcalde es un fresón. De repente, el volcán de la Isla comienza a dar sacudidas y Gazpacho, Mochilo y Pincho emprenden un viaje en busca de otro volcán donde pueda vivir la aldea.; es entonces cuando encuentran a Kumba, una niña cariñosa y tranquila que se perdió al separarse de su familia en un accidente.
Estaréis preguntándoos a qué viene todo este rollo no?. Bueno, pues ayer tuve a mi propio Mochilo y se puede decir que yo era Gazpacho -ti,ti,ti- (nos faltaba Pincho, pero tengo en mente quien era…).
Bueno Mochilo, conocido en su casa como Sergio vino de una Consultora de Madrid para ver que hago un día normal de trabajo, las herramientas de gestión, como trabaja el periódico… y así poder preparar unas jornadas de formación en Rioja Medios (no quiero formación de gestión, sólo quiero aprender Photoshop!!!!, creo que a mis jefes esto no se les va a meter jamás en la cabeza!!!!). El caso es que su misión era ser mi sombra, aunque un viernes no es un día normal de trabajo pero… (normalmente mi cuerpo no está en su mejor momento, las noches del jueves al viernes se suelen complicar, además hay que cerrar toda la publi de tres días, las visitas a la máquina de café se hacen más frecuentes y encima con el cambio de mes renovaciones...). Bueno pues con la mejor de mis sonrisas y un poco de resaca comencé el día Fruti, cafecito para despejarme, mail, vistazo rápido a la hemeroteca, unas visitillas, cambios de originales, cafecito de media mañana, reunión, ja,ja,ja,ja, nuevas órdenes, viaje a redacción, visita a Mariajo Zapata para una movida de calidad, mail, órdenes, visita a Administración, viaje a redacción, buscar unos peris, viaje a redacción… (al cuarto viaje a redacción se quedó sentadito en mi silla con la disculpa de mirar algo en internet (ja!!, seguro que estaba hasta las narices de seguir a un 1,58 que corre por el periódico cual lagartija por el desierto, que se para con todo bicho viviente y que no calla ni debajo del agua).
Luego nos fuimos a comer y a seguir rajando, se puede decir que de las 9:30 a.m. a 5 p.m., no pude hablar más (casi me dolía a mí la cabeza de escucharme…).La verdad es que el tío es muy majo, pero es un poco coñazo tener que estar pendiente todo el día de otra persona que te está interrogando para luego hacer sus informes y estudios… Vuelve a finales de mes, siempre y cuando no pida una baja para librarse
2 comentarios:
Ya iba siendo hora de que os pongan a alguien para controlaros,, pero realmente tampoco hacía mucha falta.
El día que yo hable temblará el misterio.
Y quién vigila al vigilante???. MUAK
Publicar un comentario