Cada día duermo menos y os aseguro que no es cosa del café, antes mi dosis rondaba los siete cafés y ahora tomo tres o como mucho cuatro (uno a primera hora, otro a media mañana, el tercero después de comer y si hay cuarto entre horas…).
Pero parece ser que el consumo de esta sustancia tan adictiva, como deliciosa no es el problema y que con tres horitas como mucho, a poder ser seguidas, me basta… Aunque debo admitir que llega un momento del día en el que me muero de sueño, me tengo que apoyar por las esquinas, las piernas me flaquean, mis neuronas piden un respiro y sueño con llegar a casita para tirarme de cabeza a la cama…
Así que nada, son las cuatro de la mañana, tengo los ojos como platos, estoy agotada, lloro de sueño…; pero no consigo dormir…
Leeré un rato y si hay suerte luego duermo…
5 comentarios:
se de lo que hablas... te terminas acostumbrando. Un beso guapa.
Unos copazos y a dormir
O unos polvitos...
Horas de sueño = Estatura. Tienes de sobra.
Qué rico tu tercer cafecito de hoy. BS
Mr T, somos iguales pero yo paso de pastillas, que la preparamos como Carmina...
XXX, el vino no vale, hay que intentarlo con la ginebra o el licor...
Justo, hablas de los máginos no?? (siempre mejor el plural eh??)
Mary, hoy no he crecido pero he pasado de 2h y media a unas 4...
MUAK, MUAK, MUAK, MUAK
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